Vuelve la rutina, la bendita rutina. Atrás quedó el azote del huracán Irma y el largo viaje por carretera para poner a salvo a la familia. Gonzalo Fernández-Castaño juega desde este jueves el Albertsons Boise Open, segunda parada de las Finales del Web.com Tour.
No ha sido la preparación soñada. Gonzalo lo sabe. Pero no queda otra. La seguridad de su familia está por encima de cualquier otra cosa. El madrileño ha llegado a Boise sin tocar prácticamente un palo en la última semana, aunque cargada de buenas sensaciones.
Por un lado, la siempre agradable confirmación de que todos los suyos están bien tras el paso del huracán por Miami. Y por el otro porque llega a un campo donde el recuerdo de lo que pasó el año pasado es muy positivo. Acabó top ten, jugando un golf de muchos kilates y asegurando prácticamente su plaza en el PGA Tour para este año. Todo eso puede compensar cualquier déficit de entrenamiento.
Gonzalo llega al Boise Open metido entre los 25 primeros del orden de mérito de las Finales, es decir, dentro del objetivo, de lo que se busca y necesita para regresar al circuito americano. Eso también confiere una tranquilidad positiva y notable.
Gonzalo saldrá a jugar este jueves a partir de las 21.23, hora peninsular española. Hay ocho horas de diferencia.