Gonzalo Fernández-Castaño no estará el fin de semana en Royal Liverpool. El jugador madrileño ha firmado una tarjeta de 76 golpes en la segunda ronda del Open Championship y se ha quedado fuera del corte.
Un día nuevamente muy irregular en todas las parcelas del juego ha terminado pasando factura al golfista de Puerta de Hierro. De momento, la dinámica no cambia, pero hay margen por delante para enderezar la temporada y a ello va a dedicarse Gonzalo en cuerpo y alma. “Por unos motivos u otros no están saliendo las cosas. Es una cuestión de confianza, pero aún quedan cuatro torneos por delante (Canadá, Bridgestone, PGA y Wyndham) para darle la vuelta a la tortilla y pondré todo de mi parte para conseguirlo”, aseguraba Gonzalo poco después de firmar la tarjeta.
La irregularidad es el principal problema de Fernández-Castaño. Hoy ha hecho cinco bogeys y un solitario birdie, curiosamente en el último hoyo del día. “Al menos nos vamos con un mejor sabor de boca”, señalaba resignado. Y añadía: “hago swings muy buenos, pero también hago luego otros muy malos con el mismo palo. Además, hoy los putts han sido muy pobres. En días como hoy es difícil encontrar cosas positivas”, remataba.
Gonzalo se marchará ahora rumbo a Canadá para jugar el próximo torneo del PGA Tour.