Gonzalo Fernández-Castaño ha firmado una vuelta de 70 golpes (PAR) en la tercera jornada del The Greenbrier Classic. Ha sido una vuelta ordenada, sin demasiados sobresaltos, pero a la que le faltó cambio de ritmo para ponerse en marcha.
El golfista madrileño se mantiene con un acumulado de uno bajo par, pero ha perdido algunas posiciones en la clasificación, ya que en las primeras horas de la jornada del movimiento se están viendo casi el triple de vueltas bajo par que sobre el par. El centenario The Old White TPC sí se está dejando hacer hoy.
Gonzalo empezó con bogey en el 1 y salvando un buen par en el hoyo 2, embocando un putt de casi dos metros tras fallar el green. Un inicio complicado que para nada sería augurio del resto. A partir de ahí su juego se entonó, comenzó a cazar greenes y se dejó algunas buenas opciones, como en el 3, por debajo de cuatro metros, o la más clara de todas, en el 4, de unos tres metros. Su primer birdie cayó en el hoyo 7, tras meter un buen putt de algo menos de tres metros, aunque pronto caería un nuevo bogey, en el 9, tras un doloroso tripateo a siete metros de la bandera.
Sus segundos nueve hoyos fueron una secuencia de greenes cogidos y opciones lejanas de birdie que no llegaron a concretarse, a excepción de la del hoyo 12, par 5, donde jugó de libro. Ahí niveló las fuerzas con el campo, pero le faltó un putt largo, de los llamados bonus, para poner en marcha con fuerza la maquinaria.
