Gonzalo Fernández Castaño se ve listo y preparado para afrontar el Open de Kenia y hasta lo hace con un moderado optimismo, a pesar de que los resultados no han salido como esperaba en Omán y Qatar, donde fallaba los dos cortes. “La semana pasada, en Qatar, pegué a la bola mucho mejor de lo que dijo el resultado, pero el putter no estuvo fino, así que tengo ganas de probarme aquí, en Kenia, en un campo a la vieja usanza, muy interesante, con greenes pequeños y calles estrechas y entre árboles. Me siento bien y con buen ánimo”, dice.
El recorrido del Karen Country Club, escenario del torneo a las afueras de Nairobi, está situado a unos 1.800 metros sobre el nivel del mar, por lo que la bola vuela mucho más y hay que ajustar las distancias. El campo, por lo tanto, se juega corto y por ello se utiliza menos el driver desde el tee, entre otras cosas. Cada jugador busca las alternativas que mejor le van y en el caso de Fernández Castaño esta semana va a cobrar especial protagonismo la madera 5, un palo que está utilizando mucho de salida.
El madrileño sale a jugar el jueves a partir de las 12,50 horas locales (10,50, horario peninsular español) junto al sudafricano Haydn Porteous y el coreano Hosung Choi.