Gonzalo Fernández Castaño ha comenzado el Zurich Classic of New Orleans con una vuelta de 75 golpes. El madrileño firmó un birdie y cuatro bogeys y necesitará hoy una vuelta realmente baja para pasar el corte en el TPC Louisiana.
Gonzalo cumplió a rajatabla este jueves con aquel refrán tan español que dice que a perro flaco todo son pulgas. Salió a jugar cuando peor pintaba la cosa en el cielo de Avondale. Tanto es así que más o menos a la hora de haber empezado a jugar, el juego se suspendió por lluvia torrencial. El arranque ya fue complicado, con el añadido de que los resultados de la mañana habían sido muy buenos. Es decir, empezó a jugar sabiendo que necesitaba muchos birdies y se encontró una panorama de lo más áspero para cumplir la misión.
Cuando el juego se suspendió, Gonzalo llevaba dos bogeys en apenas cinco hoyos. A la vuelta hizo un birdie, pero acto seguido cometió bogey y firmó uno más por los siguientes nueve. Se le pone el torneo cuesta arriba, aunque el jugador español no tira la toalla. Necesita una vuelta baja para meterse en el corte, establecido provisionalmente en -2.