La capacidad de lucha ni se compra ni se vende. Se tiene o no se tiene. Se puede mejorar, pero si no viene de serie está complicado sacársela de la manga. Gonzalo Fernández-Castaño la lleva en el ADN. Lo mismo sea el PGA Tour o el European Tour; el Deutsche Bank o el KLM, da igual. Si hay que remangarse para pasar un corte se hace y listo.
Gonzalo ha vuelto a dar una lección hoy en Holanda. Ha pasado el corte sufriendo, pero lo ha pasado. Empezó por el hoyo 10, con dos birdies en el 14 y en el 17 que le allanaron el camino, sin embargo, el inicio de los segundos nueve presagiaban lo peor. Enlazó tres bogeys en los hoyos 2, 3 y 4. Ahí estaba fuera del torneo y quedaban apenas cinco hoyos por delante.
El madrileño se podría haber dejado de llevar, tirar la toalla y maldecir su suerte, pero en cambio se remangó, levantó la cabeza y terminó con dos birdies en el 6 y en el 7 que lo metieron en el corte, puesto 55º. Gonzalo está lejos de los lugares donde se negocia la victoria, pero al menos se ha dejado una oportunidad de brillar el fin de semana en la casa donde ganó su primer torneo del Circuito Europeo.
