No fue el día del movimiento que necesitaba Gonzalo Fernández-Castaño en el Portugal Masters. Más bien al contrario. Rubricó una tarjeta de 72 golpes, uno sobre par, y se dejó mucho terreno en la clasificación. Demasiado.
Tanto es así que ahora mismo sólo le queda el recurso de la épica. Necesitaría una ronda de siete u ocho menos para tener alguna opción de alcanzar el objetivo de retener la tarjeta. Sus propios cálculos pasan por un top 7. Ahora mismo, este puesto está a siete golpes de diferencia.
La misión, como ven, es complicada, pero no imposible. Gonzalo lo intentará mañana. Necesita, sin ir más lejos, hace la mejor vuelta del año en el último intento. Así, aún tendría alguna opción de mantener la categoría 10 antes de jugar la final de la Escuela.
En cualquier caso, recuerden que tiene asegurada la categoría 18 para el próximo año, que le permitiría jugar al menos veinte torneos.