Gonzalo Fernández Castaño afronta desde este jueves el KLM Open, la undécima prueba del circuito europeo que juega en 2018 y un torneo del que obligatoriamente guardará un bello recuerdo durante toda su vida, pues fue el primero que ganó (año 2005).
La relación del madrileño con esta cita, de todos modos, podría considerarse de amor y odio, pues parece que no hay término medio en sus participaciones: o lo hace muy bien, hasta el punto de haber ganado una vez, o bien no pasa el corte. Gonzalo colecciona tres top 5 (ganó en 2005, fue 4º en 2010 y 5º en 2012), pero se quedaba fuera del fin de semana en el resto de sus apariciones, salvo en 2014.
El español, ya centrado en este último tramo de la temporada en el circuito europeo, necesita un buen resultado que le permita asegurar los derechos de juego para 2019. Los horarios de salida, de momento, le han deparado una buen noticia, pues jugará el jueves y el viernes junto a Álvaro Quirós, gran amigo suyo, y el argentino Ángel Cabrera, viejo compañeros de aventuras y desventuras que afronta el torneo con los 49 años recién cumplidos.
